lunes, 23 de febrero de 2009

Reflexiones sobre el podcasting



Los que estáis dentro de este mundillo del podcast, os quedaréis con la definición de que un podcat es una sindicación de audio, y video podcast una sindicación de contenidos de vídeo.

Para los que conocéis un poco el tema, pero no tratáis con la informática ni con las nuevas capacidades de lo que fue llamado la web 2.0, un podcast es un archivo de audio (léase mp3) que te puedes descargar en cualquier dispositivo ipod, teléfono móvil, pc, pda, etc), y que puedes escuchar cuándo y dónde quieras.

Y para los neófitos en la cuestión, pues radio a la carta.

Para mi es más que eso. Sí, es audio a la carta, pero llevado a un nivel superior. Tú eliges los contenidos y escoges el audio más apropiado para cada momento del día. ¿Interesante, no?

Mucha gente ha ido descubriendo todas estas posibilidades en los últimos años. Personalmente , mi primer contacto fue precisamente en la radio, con el programa ya fallecido "Vanguardia de la Ciencia", un programa de RADIO llevado al podcast, en el que al final de un interesante programa, comentaban que era posible volver a escucharlo en formato podcast. A partir de ahí, un mundo de posibilidades.

Y es que hay que diferenciar claramente lo que es un podcast, de lo que es un programa de radio adaptado al podcast, y de lo que es un programa de radio alojado en algún servidor, para poder ser descargado en cualquier dispositivo.

Técnicamente hablando, el podcast es un programa creado para ser sindicado (sindicado es más o menos autodistribuido), que no forma parte de las ondas herzianas, y que posee características adicionales que le dan potencia, como descripciones del contenido embebidas dentro del propio archivo de audio. Quiero hacer esta aclaración porque no todo lo que se dice que es podcast, es un podcast, si bien es cierto que el contenido que en él se divulga puede ser tanto o más interesante que muchos podcast que circulan por internet.

Llegados a este punto, alguno se preguntará: ¿Como puedo ser podcaster? Coge un micrófono, habla, guarda el audio en algún archivo de audio soportado por la web, y súbelo a un servidor .¿Ya? No. Los audios se aglutinan en un -vamos a llamarlo canal-, que permite al internauta suscribirse al mismo, y que cada vez que el autor publique algo nuevo, se nos descargue a nuestro dispositivo.

Y hablando de dispositivos, para mi sólo hay uno. El ipod (o similares de apple). De acuerdo, no conozco todos, pero no me hace falta. Para mí, lo que de verdad le da grandeza a este formato de audio, es el dispositivo en el que lo reproduces. Decirme si el vuestro puede,

  • almacenar el segundo exacto en el que dejas de escuchar un audio, para retomarlo después. Puedes hacer lo mismo con cuantos podcasts quieras, que siempre le darás a reproducir y se encontrará en el mismo instante en el que los dejaste.
  • Y aún mejor. Si tardas en reproducirlo, en vez de comenzar en el mismo instante, retrocederá (quería decir rebobinará pero eso ya queda muy lejos) unos cuantos segundos, para poder volver a coger el hilo del tema
  • Imagen o icono del audio de marras
  • Puedes votar a tus propios audios (con 5 estrellas) para luego poder seleccionar aquellos que más te gustaron
  • Ver la descripción que el propio autor ha hecho sobre el contenido
Y el itunes, con muchos detractores iniciales, es un producto con una curva de aprendizaje más larga de lo normal, pero que al final el esfuerzo se ve recompensado.


Todos los días me hago la misma pregunta: ¿Por qué el mundo del podcast no se está difundiendo como se merece? Cada día hay más y más podcasteros, pero el incremento es lento, muy lento. A cuadros se les queda la cara a mis compañeros de trabajo y amigos, cuando en medio de una conversación en el desayuno, en la que casi todo el mundo habla de las series, como It Crowd, Dexter, Battlestar Galáctica, Prision Break, Héroes... voy yo y digo. ¿Escucháis podcast? y van y me dicen: No, no los conozco. ¿Qué tipo de música tocan?.

¿Cual es el problema? La difusión, la calidad, o la cultura. Si habéis leído hasta aquí, eso os honra, pero haceros un favor a vosotros mismos. Coger el itunes (que es grátis), o cualquiera de las páginas web dedicadas a catalogarlos, y buscar unos cuantos canales bien valorados.

Y luego lo comentáis.

En unos cuantos años, la televisión será a la carta. Como los canales de pago de ahora, pero a lo bestia. Y entonces, ya nadie se acordará de aquellos pequeños pioneros que con sus micrófonos cutres hablaban de lo que les venía en gana. El podcast no llega a despegar, y no sé por qué.

Es el momento de las críticas, los comentarios, y los halagos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hombre, yo no creo que esté en declive; mi opinión es que el sector está muy segmentado, no hay demasiados podcasts punteros y sin embargo sí hay muchos pequeños, al estilo de la teoría de la larga cola; eso da una idea de cierto abandono de oyentes (Fenollosa se queja de eso por dame la voz), pero creo que en realidad es sólo una sensación debida a la observación del mercado clásico, véase seguimiento y estadística de oyentes; debemos empezar a pensar que los modelos, análisis y estudios orientados al mercado clásico se van a dar de leches al intentar hacer lo mismo en la red. Respecto a los oyentes, y dejando a un lado ese (d)efecto de creer que todo el mundo conoce lo que nosotros conocemos en la red (cuánta gente no conoce aún tuiter, o sólo han oído algo del feisbú), sí existe gente que sabe que se pueden descargar los programas de radio y supongo (me consta, de hecho, en algunos casos) que lo único que querran escuchar es la radio porque "son profesionales, saben lo que hacen, no son frikis", y todo lo que se oye por ahí.
Mi última opinión y resumen: cuando las nuevas generaciones de periodistas se den cuenta de que pueden ser independientes gracias al podcast, y que éste puede ser una herramienta didáctica brutal, el podcast lo petará porque será famoso, (bueno, quizá no tanto, pero por ahí van los tiros) y el nombre será lo de menos: ¿la gente diferencia podcast, radio convencional o radio on-line? Me da que no.

Se me olvidaba, JANE te manda saludos ;)

Anónimo dijo...

Poseo una página web (www.elgaleondelmisterio.com) donde hay únicamente archivos de audio de programas de radio que se emiten a horas de poca audiencia y que tienen una misma temática (más o menos). Con la idea de unificar en una web estos contenidos.

Y estoy de acuerdo con Javier en que la gente no diferencia entre podcast, radio convencional o radio on-line. La gente lo que ve es una grabación de ese programa que no ha podido escuchar y que ahora puede hacerlo o descubrir un nuevo programa que ni sabia que existía, se “engancha” y con frecuencia se pasa por la web a ver si se ha subido la última emisión. Y también pienso que todavía falta un poco para que llegue el “boom” del poscasting, pues aunque la tecnología que se necesita esta al alcance de cualquiera, no son muchos los que conocen su existencia y aquellos que lo conocen se encuentran un maremagnun en La Red que les hace difícil encontrar lo que quieren.

En cambio en el sector que me muevo al ser programas de radio que se emiten los fines de semana de madrugada que casi tienen más audiencia por podcast que en directo. En todos los programas siempre se dice la web donde pueden descargarse los archivos de audios correspondientes y cosa curiosa, no se utiliza mucho el nombre podcast sino “descarga de programas”, evidentemente los programas anuncian sus respectivas web (RNE, Onda Cero, Punto Radio, etc…) por lo que nuestra habilidad es crear un centro de distribución independiente de dichos programas y para ello debemos utilizar nuevos modelos que hagan eso posible (cosa nada sencilla).

A mi también me ha pasado lo de: ¿Escucháis podcast? y van y me dicen: No, no los conozco. ¿Qué tipo de música tocan?. Otra vez cambia la palabra podcast por “descarga de programa de radio” veras como la respuesta es diferente.
Desde mi modesto punto de vista el fenómeno del podcast o mejor dicho “descarga de programas de radio” esta empezando a dar sus primeros pasos y lejos de estar estancado crece día a día y como toda infección vírica llegara un día que explosionará. Aunque hay que crear nuevos modelos de negocio antes de que esto ocurra.

Un saludo,